¿Te suena la palabra raquetas de nieve, pero no sabes muy bien lo que son, para qué son útiles y/o cuándo se deben utilizar? Aquí la guía:
¿Qué son las raquetas de nieve y para qué sirven?
Entrando en la definición, las raquetas de nieve son unas herramientas que se adhieren a las botas y nos permiten andar sobre el terreno helado con mayor facilidad que si lo hiciéramos con un calzado habitual de trekking o senderismo. Esto se debe a sus características y diseño específico para andar en la nieve.
¿Para qué sirven las raquetas de nieve?
Desde la antigüedad las raquetas para nieve se han usado para desplazarnos con menor esfuerzo en terrenos nevados. Con las raquetas de nieve puestas podemos caminar sobre la nieve sin soportar el efecto severo del hundimiento de las botas, con la fatiga que eso conlleva en una ruta de trekking.
Las raquetas de nieve tienen muchos años de historia: la raqueta de nieve más básica y antigua que se conoce se estima que tiene más de 5.500 años. Es decir, estas piezas llevan haciéndonos la vida más sencilla en las montañas desde hace mucho tiempo para movernos por terrenos blandos o resbaladizos. En definitiva, más difíciles.
En algunas de tus rutas de trekking vas a encontrar estos accesorios tremendamente útiles. Se nota mucho la diferencia entre andar por la nieve solo con las botas y con las raquetas adheridas. Si no las has probado y sueles hacer rutas por paisajes nevados te recomendamos hacerte con unas y experimentar: te encantarán.
¿Cómo funcionan estas herramientas para caminar sobre terrenos nevados?
Las raquetas de nieve se colocan debajo de las botas, de manera que aumentan la superficie de apoyo que estas tienen sobre un terreno nevado o con hielo. No solo eso, también ejercen una función de equilibrado del peso por toda la superficie que suman al unirse a las botas.
¿Cuándo se usan las raquetas de nieve?
Las raquetas de nieve son usadas por guardas forestales, otros profesionales y excursionistas que en sus trayectos deben andar por terrenos helados. Las raquetas proporcionan un mejor agarre al adaptarse a las características del suelo.
Siendo así, las raquetas de nieve solo se usan en los momentos o tramos de rutas de trekking o senderismo donde el suelo está completamente cubierto de blanco y la tierra prácticamente brilla por su ausencia.
Si en tu ruta, todo el camino es así, entonces usarás las raquetas de nieve durante todo el trayecto. Si se trata únicamente de pequeños tramos, entonces conviene llevarlas de manera cómoda con nosotros para engancharlas a las botas cuando lo necesitemos.
¿Cuál es la estructura de una raqueta de nieve?
Para comprender bien el funcionamiento de las raquetas de nieve es interesante saber qué estructura tienen o de qué partes están compuestas.
- La base: Nos referimos a la pieza que se acopla a la bota y con la que conseguimos distribuir tanto el peso como tener mayor cobertura de fijación. (Marco)
- El sistema de fijación: Es el sistema que fija la unión entre base y bota.
- Los crampones: Son unas mini cuchillas ubicadas en la propia suela que ayudan a caminar con mayor facilidad cuando andamos sobre hielo ejerciendo una función de agarre.
En base a su estructura podemos encontrar distintos tipos de raquetas de nieve. Para rutas de senderismo o trekking te vendrán bien unas diseñadas para pendientes de menos de 25 grados, que son la mayoría de las que encontramos en el mercado.
Si nuestra intención es subir trayectos con un grado de pendiente superior, entonces tendremos que comprar unas profesionales. Estas se caracterizan por integrar distintas características muy técnicas como un alza para subidas o menores dimensiones en cuanto al ancho.